Así, sin avisar y sin anestesia.

El sábado fue el entrenamiento conjunto. Empezamos trabajando armas, más bien trabajando jo, y luego dimos paso a la clase normal de aikido, centrada en kaeshi y la igualdad del papel de uke y tori.

Con el jo trabajamos el patrol kata de Saotome, en concreto las cinco primeras katas, y la verdad es que yo por lo menos trabajé muy agusto, sobre todo la cuarta kata, que la trabajé con Raúl e hizo que nos ganáramos las pastas, jeje.

Ya en la segunda parte, Juan nos intentó transmitir que el papel de uke y tori es el mismo, que tori en un momento dado se vuelve uke y que ninguno de los dos debe dejar de tener en mente su papel, de recuperar el centro por parte de uke, y de desequilibro de uke, por parte de tori. Fue un trabajo divertido, que además no se suele trabajar mucho.

Y de repente, en de entre la nada, aparecé Juan y me dice si quiero pasar mi examen de 4 kyu. La verdad es que teniendo en cuenta que no había pasado los nervios de antes, como pasó con el amarillo, era la opción perfecta para pasar todo el trago de golpe, pero claro, eso hizo que habiendo estado una semana sin practicarlo, el examen no saliese todo lo bien que pudo ser. Hubo algunas técnicas que salieron bastante flojas, y lo que más me fastidia es saber que puedo hacerlo mucho mejor, como he hecho cuando lo he preparado.

Por supuesto, al ser sin avisar, no hubo cámara, así que una vez más, mis fans se quedarán sin ver mi patético y horrendo examen de 4 kyu, y viéndolo así, no me pena nada de nada. Lo siento sardaukar, ya te reirás en el 3 kyu, o cuando coincidamos en un tatami.